Destacado gesto del concejal Eduardo Gianfrancesco al dar marcha atrás un proyecto

Tras la polémica desatada por el proyecto de imposición de nombre a una plazoleta de Ingeniero Maschwitz, el autor del escrito dio marcha atrás con la iniciativa.

El espacio ubicado en calle El Dorado, Patricios y La Plata en realidad fue denominada Plaza Aviso Alférez Sobral, el 26 de julio de 1.988 bajo la Ordenanza N° 476/88. Situación esta que era desconocida por el concejal Eduardo Gianfrancesco, quien había presentado el proyecto para denominarla Carlos Saúl Menem.

Consultado por este medio, en relación al proyecto en homenaje al Ex Presidente Menem, el Concejal Eduardo Gianfrancesco manifestó: «En primer lugar Menem siempre hablo de la unidad de los argentinos. Recordar a Menem es recordar a una persona que no odiaba y que siempre a pensado en la unidad de todos los argentinos. Nunca tuvo sentimientos de rencor ni de odio para nadie. Por eso me pareció importante la iniciativa.
En segundo lugar la verdad soy sincero desconocía el nombre de la Plaza y que estaba relacionado a Malvinas. Algo tan importante para todos los Argentinos.
Cuando vi que había cometido un error me comunique con algunos vecinos pidiendo las disculpas por el caso y avisándoles también que no iba a prosperar el proyecto.

Soy de escuchar las críticas constructivas y entiendo que no es malo reconocer los errores y dar marcha atrás cuando es necesario.
Espero que después de estás idas y vueltas de este error se puede lograr algo positivo, como poner la bandera argentina en el mástil de la plaza y poner en puesta en valor el espacio público en cuestión como era parte de la idea. Hacer las veredas de la plaza, poner iluminación que actualmente no funciona y embellecerla.
Y ya que estamos aprovechar y poner una letrero con el nombre que lleva la plaza Alférez Sobral para que todo el mundo sepa de su existencia y no ocurra lo mismo como me pasó a mi» – concluyó el edil y vecino de Ingeniero Maschwitz.

Un gesto a destacaren una época donde los políticos no siempre reconocen un error y mucho menos lo enmiendan.