Interés General
Vestirse sale más caro que comer
En medio de la escalada inflacionaria, la ropa le viene ganando a los salarios, los alimentos y al índice general de precios varios cuerpos.
Según la última medición del INDEC: los textiles se incrementaron 67,3% en los últimos doce meses, contra 59,7% de suba de los alimentos y 55% de la inflación general.
Ante las críticas en las redes por la suba de los precios, Pro Tejer salió a defenderse con el argumento de que el salto de los precios es consecuencia del aumento de los costos internacionales, el lanzamiento de la temporada otoño-invierno y hasta de la guerra en Ucrania. Lo cierto es que la gente sabe que se trata más de un tema especulativo que la consecuencia de los insumos importados que tuvieron aumentos mayores a 40% en dólares en relación con la prepandemia.
En tanto el sector apuntó contra el INDEC, al decir que la medición sobre los precios de la ropa se centra en los shoppings, «que venden ropa de marca premium», y tienen mayores costos de alquileres, marketing y publicidad que otros canales de venta.
De todas maneras insistieron en asegurar: «Si los precios internacionales no ceden, ese factor que es muy potente se traduce en los insumos de fabricación local».