COLUMNA DE OPINION
El camino de la montaña, como el de la vida no se recorre con las piernas sino, con el corazón»
Por Diego Celador
5 de agosto es el Día del Montañista.
«Hoy tengo el deseo de escribir de decir lo que me pasa en el pecho, de gritarlo a quien quiera oirlo. Me enfrento con una realidad frustrante, no tengo virtudes para la escritura. Soy un tipo con pocas virtudes. Mas aún para el arte o lo artístico..
Hoy 5 de agosto es el DIA DEL MONTAÑISTA y todo el día tuve ganas de expresar lo que siento por las montañas o en la montaña…
Claro está que la mayoría de la gente no la comprendería. No sé a quien podría destinarle esas palabras a quien podría interesarle…
Mis hermanos de montaña saben lo que siento y «como siento» los mas cercanos y los no tanto. Algunos lo saben más y otros menos.
Que les voy a contar todo lo que me enseñó la montaña si ellos lo saben. Si ellos estaban ahí, lo aprendimos juntos….
Que les voy a contar del GRUPO DE TREKKING ESCOBAR que formamos donde pib@s con discapacidad que casi no conocían la montaña, disfrutaron la naturaleza y aprendieron entre muchas otras cosas a armar la mochila y poner todo lo necesario en forma autónoma, a caminar en grupo uno atrás del otro, a usar los bastones, a cuidar la naturaleza, dormir en un refugio o morirse de sed con 38 grados para hacer una cumbre sencilla CERRO FUNKE que fue para ellos muchos más alta que cualquier + 6500…
Que les voy a contar que con X MAS INCLUSION hicimos un quilombo hermoso donde se habló y se habló de inclusión de las personas con discapacidad y se interesaban de todas provincias en el proyecto. Que tuve el placer de abrazarme en la cumbre del CERRO TRES PICOS con un campeon del mundo y un equipazo de amig@s que laburo duro, de compartir un champa único con Ema,Tomi y Ricky y LOS HOY NO DUERMO EN CASA (gente del bien), de hacer cumbre en el soñado Volcán Galán con Christian, Ridu y Marco. Mientras Gustavo Maidana se quedaba a 5500 después de no dormir en toda la noche, pero intentar su cumbre con más corazón que otra cosa. Que les voy a contar que Gustavo es ciego si ya lo saben y llegó a 5500 mts ¿cuántos de ustedes se animan a eso disfrutando del sentido de la vista?…
Que les voy a contar que con AIRE PURO conocí gente hermosa, que hoy muchos son amig@s y bjuntona mi amigo Ale logramos ser puente/vehiculo para que muchos personas se acerquen a la montaña y que la disfruten con respeto y amor. Obvio de manera comercial (ganó plata) pero siempre en forma cariñosa, respetuosa y humana. Intentando trasmitir lo que se y sobre todo lo que siento por ella…
Que les voy a contar de Ale, de Pablo, de Ardusso, de Grupo Mañke, de Dozo, de Valero, de Marco y de mi hermano del alma el Cheva que empieza con la altura y mete su primer 6 mil. Si de ellos y con ellos aprendí todo…
Que les voy a contar mi alegria de mi primer 4 mil y mi primer 5 mil con un guía docente como Valero ( tipazo) juntos a Pablito, la aventura con Ardusso en vallecitos y el auto del pueblo (escobar/ Mendoza a GNC jajaja) no había un mango pero ahí nos esperaba el Adolfo Calle vestido de blanco. Y empezaron los viajes a Catamarca al Chucula y al Laguna Blanca que nos sacaron cagando y nos hicieron ver la realidad NO ESTABAMOS PREPARADOS ni como grupo ni como montañistas autonomos…
Que les voy contar que un día se dio el 6 mil tan esperado y deseado. Con tanto aprendizaje grupal y personal que volví y ya no era el mismo…
La montaña me dió tanto que ya no le pido nada. No puedo pedirle nada. Lo que venga es todo regalo. Todo lo pudimos hacer en equipo. Nada solo. Mirando al compañero. Escuchandonos y equivocandonos.
La montaña me dió hermanos del alma. Muchísimos abrazos, me hizo llorar de emoción tantas veces, mearnos de risa en la carpa, charlas eternas, cielos estrellados, amaneceres, vivacs, hasta dedicarle esa cumbre a mi viejo enfermo vestido de payamedico y mucho más, las historias se multiplican son muchas…
Me enseño que la cumbre está en casa y que siempre ella va estar ahí esperando para que volvamos. Me enseño que siempre que se pueda hay que seguir. Como en la vida, con dolor y con cansancio. Seguir. En las difíciles o en las peores. Seguir.
Agradezco todo y ya no le pido nada. Seguimos soñando nuevos proyectos, seguimos caminando por qué estamos vivos y porque ahí somos «tan pero tan felices»
VAMOS POR MAS MONTAÑAS SIEMPRE..
El camino de la montaña, como el de la vida no se recorre con las piernas sino, con el corazón».
