La Secretaría de Seguridad de la Municipalidad de Escobar informó que, en la noche del lunes fue capturado el genocida Roberto Carlos Brunello por efectivos policiales de la División Comando Patrulla Escobar y personal perteneciente a la PFA, en la intersección de las calles Doctor Travi y Bernardo de Irigoyen, en la localidad de Belén de Escobar.
El ahora detenido es un militar retirado con la jerarquía de teniente coronel, quien había sido imputado por delitos de lesa humanidad por el Juzgado Federal Nº 1 de Bahía Blanca, cometidos durante la última dictadura cívico militar. El Ministerio de Seguridad de la Nación había ofrecido dos millones de pesos de recompensa para quienes pudieran aportar datos sobre su paradero. La información podía suministrarse en la línea telefónica 134 o escribiendo a través de un formulario publicado en la página web de esa cartera. Su último domicilio conocido fue en “Las Brisas Country Club”, Carrión N° 480, unidad funcional N° 349 de Zelaya, en el partido de Pilar.
Brunello, de 72 años, se encontraba prófugo desde el 22 de noviembre de 2013 y está imputado por los delitos de secuestro, aplicación de torturas, ejercicio de violencia sexual y homicidio, bajo la modalidad de desaparición forzada de persona.
Por su parte, fuentes judiciales informaron que el detenido se desempeñó en la compañía de combate My Keller del Batallón de Comunicaciones 181 con asiento en la ciudad de Bahía Blanca. La causa por la cual Brunello era buscado centra su investigación en integrantes del Quinto Cuerpo del Ejército, agentes de la Policía Federal, de la Policía Bonaerense y del Servicio Penitenciario provincial por delitos cometidos durante la dictadura cívico militar.
La Unidad Fiscal explicó que la investigación avanzó respecto de otros imputados y que próximamente comenzará el juicio oral, en lo que se conoce como mega causa Zona 5. En ese debate, será la primera oportunidad en la que se juzguen delitos sexuales sufridos por una víctima que permaneció cautiva en el CCDyT que funcionó en instalaciones del Batallón de Comunicaciones, además de los secuestros, torturas y homicidios que sufrieron otras 56 víctimas.