Detuvieron a médica trucha que trabajaba en una clínica privada

Atendía enfermos terminales. La falsa médica, de nacionalidad colombiana, falsificaba la firma de una profesional de General Rodríguez y tenía un sello con su nombre.

Tras ser descubierta por la hija de un paciente comenzó una investigación que derivo en su detención el pasado martes, en la ciudad de Merlo. La mujer (Sofía G) trabajaba en una clínica privada de Pilar.

El mes pasado, el hombre fue trasladado por su obra social a una clínica Privada de Pilar y fue allí donde la denunciante detectó que quien firmaba las ordenes y recetas tenía el mismo nombre de una profesional de General Rodríguez que ella conocía y se llamaba Silvia. Cuando la falsa médica fue increpada, acepto la acusación e intento llegar a un acuerdo con la hija del paciente. La falsa médica le propuso tener un trato preferencial con su padre a cambio de guardar silencio sobre la anomalía. Dos semanas después el hombre falleció.

Fue entonces que la hija del paciente realizó la denuncia en la UFI Nº2 de Pilar, a cargo de Andrés Quintana.

Tras una exhaustiva investigación, este martes personal del Departamento de Inteligencia Contra el Crimen Organizado de la Policía Federal detuvo a la falsa médica en su casa particular de Merlo. Seria esposa de un médico argentino. En el departamento se encontraron muestras de antibióticos, ampollas inyectables y más recetas y formularios con los nombres de por lo menos cuatro pacientes que mencionan obras sociales como IOMA, todos con la firma y sello de la médica usurpada.

La policía investiga como llego el sello de la verdadera doctora a las manos de la impostora ya que la profesional de General Rodríguez aseguró no conocerla. Se pudo establecer que la mujer colombiana había presentado un falso título en la clínica de Pilar que la contrató y no se descarta que tenga algún DNO trucho con los datos de la verdadera doctora.

La imputada se encuentra detenida en la Comisaría de Pilar y deberá declarar frente al fiscal Quintana, seguramente por varios delitos, entre los que se destaca: «Ejercicio ilegal de la medicina». El fiscal Quintana también ordenó intervenir el teléfono de la mujer llamada Sofía ya que hay una escucha un poco inquietante, una conversación con la directora de la escuela cuando en plena pandemia la falsa médica mando a su hijo al colegio con fiebre y con un certificado trucho.