Interés General
Repercuciones por la entrega de 102 escrituras a vecinos de Escobar

Continúan las repercusiones por la entrega de 102 escrituras en el marco de la Ley de Regularización Dominial que se llevó a cabo este martes por la mañana en el teatro Seminari.
Con la presencia del intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, acompañado por el subsecretario de Hábitat de la Comunidad de la Provincia, Rubén Pascolini, se realizó esta nueva entrega que permite que familias de todo el partido de Escobar accedan al título de propiedad de su hogar y a la seguridad jurídica que esto implica.
Durante su breve discurso Pascolini enfatizó la importancia de la confianza en un gobierno (provincia, municipio) que está presente y actúa, diferenciándose de aquellos que están ausentes cuando más se les necesita, en clara alusión al Estado Nacional y su desacertada política de vulneración de los derechos ciudadanos.
Varios de los vecinos beneficiados agradecieron este «compromiso» por parte del Jefe Comunal y del gobierno provincial y señalaron: «Este tipo de políticas nos permiten de esta manera el acceso a la vivienda digna y nos garantiza la protección jurídica que necesitábamos para nuestras las familias».
Ramón vecino de Maquinista Savio dijo: «Nosotros pudimos entregar la documentación necesaria gracias a que nos asesoraron y acompañaron en cada trámite. Nunca nos pidieron un peso, cosa que además no teníamos, y por el contrario tampoco nos sentimos indigentes. Siempre nos trataron con mucho respeto y cariño. Estamos felices y agradecidos».
Por su parte, Estela señaló: «Mi hermana vivió 20 años con el temor a que la expulsen de su hogar. Hubo, incluso, amenazas de personas que decían ser los dueños de la tierra porque ella compró con problemas de papeles. La amenaza del desalojo estuvo siempre. Pero al final la dejaron en paz porque se comprobó que el terreno no les pertenecía a los que reclamaban. Por eso tener este título de propiedad no es solo el derecho a su vivienda sino a la vida digna».
Los testimonios de los beneficiados y de sus familiares giraban siempre sobre la importancia de poder dejarles a los hijos un bien sin problemas jurídicos y que a la vez podían utilizar para garantía o sacar un crédito hipotecario para agrandar o refaccionar la casa.
La felicidad en sus rostros, o la forma en que exhibían sus escrituras con orgullo, hablan a las claras de la importancia de esta herramienta y resalta el valor del esfuerzo y el trabajo para lograr que los sueños se cumplan.
Cabe recordar que la Ley 24.374 de regularización dominial y la Ley 10.830 de escritura social permiten que los poseedores de buena fe de inmuebles urbanos destinados a vivienda única, que acrediten ocupación lícita, pública, pacífica y continua anterior al 1 de enero de 2006, puedan obtener el título de propiedad.