Vecinos denuncian que son víctimas de sucesivos robos de cables de energía eléctrica

Son vecinos del barrio La Lonja. La zona afectada está ubicada en la intersección de las calles Bouchard y Saraví, aunque también se registraron casos a la altura de la calle Chile.

Desde hace un mes, vienen denunciando los robos al destacamento policial y a la línea municipal 147. Los vecinos ya sufrieron al menos cinco episodios – el último de ellos, el pasado lunes por la tarde.

Versiones indican que se trata de una banda que funciona como una organización que tras los robos de gran cantidad de cables luego comercializan el cobre que los elementos contienen en su interior.

Los damnificados que quedan sin suministro denunciaron también los hechos a la prensa local: “Quedamos desprotegidos. Cada vez que se produce obviamente el corte de energía son varias las horas que debemos permanecer a oscuras, a la espera de que la prestadora, Edenor, llegue con las cuadrillas para restablecer el servicio”.

Según los denunciantes el primer robo sucedió el 29 de marzo. Entonces creyeron que algún camión que se dirigía a un barrio que está en construcción había enganchado el tendido. “Rápidamente nos dimos cuenta que se trataba de otra cosa. Los robos continuaron. Los días 12, 14, 16 y el lunes de esta semana. Además del peligro de estar sin luz, la parte que no pueden llevarse queda colgando e incluso toca el piso. Se determinó que en ocasiones algunos tienen electricidad.

Los habitantes del barrio solicitaron el servicio de un hombre que trabaja en seguridad para intentar dar con los delincuentes en plena tarea y que la policía llegue a tiempo. Situación que claramente indica que la policía no está haciendo recorridos por el lugar y que en todos los casos acude una vez que el robo ya fue perpetrado.

En la última oportunidad cuando el vigilador se retiró a almorzar, sucedió un nuevo robo, por lo que los vecinos aseguran que los delincuentes son del lugar y ellos también están vigilando para actuar.

“Hemos armado un grupo de WhatsApp para mantenernos en contacto entre los vecinos. Estamos asustados, nos sentimos observados todo el tiempo”, explicó una de las vecinas y agregó: “Los ciudadanos nos sentimos avasallados por delincuentes, absolutamente inermes ante el abandono de las autoridades municipales y policiales, habiendo tenido que afectar nuestras maltratadas economías familiares en la contratación de vigilancia privada y la coordinación comunitaria en pro de la seguridad mediante el chat de whatsapp que conformamos quienes integramos este universo”.