Emotivo homenaje a Tetsuya Hirose por sus 20 años como presidente de la Fiesta Nacional de la Flor

En una noche cargada de emociones, el intendente Ariel Sujarchuk participó de un homenaje a Tetsuya Hirose por sus 20 años al frente de la Asociación Civil Fiesta de la Flor. El evento se llevó a cabo en el Predio Floral y contó con la presencia de familiares, amigos y compañeros de Hirose, quienes compartieron este importante reconocimiento. También estuvo presente la presidenta del Honorable Concejo Deliberante, María Laura Guazzaroni, institución que lo declaró vecino ilustre en reconocimiento a su invaluable aporte al partido.

Durante la velada, brindó un concierto la Orquesta Escuela de Ingeniero Maschwitz, hubo un emotivo video con saludos de sus seres queridos, y Sujarchuk le entregó una placa conmemorativa. “Hablar de Tetsuya Hirose es hablar de inteligencia, bondad, solidaridad, compromiso y afecto. Tengo el gran honor de considerarlo un amigo y lo llevo como un estandarte en mi corazón. Si Escobar es sinónimo de Fiesta de la Flor, es en gran parte gracias a su presidente. Por eso, el Municipio tiene la responsabilidad y la obligación de sostener, apoyar y acompañar cada vez más esta celebración que reivindica nuestra identidad como escobarenses en toda la Argentina y en tantos países”, expresó el intendente.

Techan, como lo llaman sus amigos, agradeció el homenaje y destacó el apoyo recibido: “Realmente estoy emocionadísimo, muy agradecido y contento de haber compartido con mi amigo Ariel y con toda la gente que de una u otra manera hace esta Fiesta Nacional de la Flor. Todos saben que hemos pasado tiempos muy difíciles, pero gracias al apoyo de la Municipalidad salimos adelante y cada año la fiesta está mejor”.

Tetsuya Hirose, hijo de inmigrantes japoneses, se desempeña desde 2004 como presidente de la Asociación Civil Fiesta Nacional de la Flor, posicionando el evento a nivel nacional e internacional. Además, es fundador del Instituto de Florihorticultura y Jardinería de Escobar, socio fundador del Jardín Japonés de Palermo, y fue condecorado por el gobierno japonés por su valiosa contribución al fortalecimiento de las relaciones entre Argentina y Japón. A sus 86 años, sigue siendo una figura clave para el desarrollo de la floricultura en la región.