Nota realizada por la Agrupación “HERENCIA MALVINAS ESCOBAR”- (Integrada por hijos de Veteranos de Guerra de Escobar)
Ciclo de Charlas
Invitado N.° 14 VGM Claudio Vicente MEDIAVILLA
Nacido en José León Suarez, San Martin Pcia. Bs As.
Claudio comienza contándonos que ingreso al servicio militar obligatorio por medio de sorteo y nos expresa que no quería saber nada.
Su función era la de chofer de Vehículos como el Unimog, Jeep, etc.
Malvinas:
Le quedaba una semana para que sea dado de baja, cuando se enteró del conflicto de Malvinas, no le dio importancia ya que junto a sus compañeros creían que no irían. Hasta que comenzaron a darles equipamiento y accesorios militares, y ya se lo imaginaban. Además, fueron acuartelados y no pudo dar aviso a la familia. Realizaron una formación en la plaza de armas y donde fueron trasladados hasta el Palomar de ahí en avión a Comodoro Rivadavia y abordaron nuevamente un avión hasta Malvinas, donde caminaron entre 3 y 4 km hasta Monte Longdon, donde su función seria armar campos minados y esperar ataques en los flancos de las montañas. No tenía tanta instrucción en combate debido a su condición de Chofer.
Paso varios días de frio debido a las inclemencias del tiempo. Con su grupo realizaron pozos para refugiarse, pero llegaban hasta las rodillas y brotaba agua; Escucharon que muy cerca de sus posiciones un integrante de Infantería Marina se había muerto congelado en uno de esos pozos, por lo que decidieron no hacerlos más.
Las primeras semanas pudieron comer bien ya que poseían una cocina de campaña, pero luego de los ataques pasaba mucha hambre. Por lo que comenzaban a intercambian comida y cigarrillos entre ellos. Se refugiaban en una cueva donde estaban los 6 que eran choferes y se contenían entre ellos, ya que algunos lloraban por tener hijos más pequeños y no querer estar ahí, incluso nos relata que uno de ellos llego a pegarse un tiro en un brazo para poder volverse, pero no lo logro.
Buscaban ovejas para saciar el hambre en el mientras tanto, y encontraron dos, recuerda que un Oficial se las saco, diciéndole que al día siguiente las comerían, pasada las horas descubren a este Oficial junto con otros, comiendo una oveja por lo que deciden robar la otra. Debido a este hecho Mediavilla y uno de sus compañeros fueron castigados y estaqueados en plena Guerra, sin poder defenderse si ocurría algo. Ellos querían morir luchando no ahí atados sin poder pelear. Lograron que durante la madrugada un compañero los desatara y así dirigirse al Pueblo para hablar con algún superior de los sucedidos.
Durante el camino casi pierden la vida, al no saber el “salto y seña” de las Fuerzas Argentinas.
Ya en el Pueblo pidieron hablar con un Mayor y volvieron a sus posiciones. Desde ese momento el oficial que los había estaqueado les pidió disculpas y cambio el trato, suponen que fue reprendido por dicha acción.
Pasados los días debió hacer guardia por una calle donde pasaban los camaradas y Kelpers que debían revisarlos para que no llevasen consigo radios. En ese tiempo nos expresa que llego a comer fideo crudo del hambre que pasaba. Y en un bombardeo Ingles vuelca un camión con mercadería por lo que logro agarrar algunas cosas y llevar a sus compañeros.
Ya situado en la Cueva nuevamente, cuando va saliendo junto a un compañero pasa un avión lanzando una ráfaga de ametralladora y dos bombas, pasa un segundo avión y hace lo mismo hiriendo a su compañero José Domingo Curima en el pecho y cae abatido detrás de una piedra. Mediavilla recuerda que ese día fueron bombardeados constantemente. Varios compañeros y un Sargento bajaron como 20 cuadras donde había una lanza misil y lograron bajar y derribar uno de esos aviones. Durante la noche seguían los ataques de los barcos que tiraban hacia la montaña.
Escucharon por radio varias noticas, primero que aviones argentinos habían hundido 3 o 4 barcos y luego que algunos barcos Ingleses habían desembarcado tropas en la Isla. Ellos veían que en la montaña de enfrente ya estaban atacando, los tenían cada vez más cerca.
Una tarde tranquila en pleno silencio se levantó de una breve siesta a hacer guardia a las 21 hs y comenzó a escuchar tiros cerca, dando aviso al mayor. El día de su cumpleaños un 13 de junio desde las 21 hs hasta las 07 hs atacaron junto con otras divisiones sin dejar pasar a los ingleses; Recuerda que eran tiros, bombas, tiros, bombas sin cesar. hasta llegar a luchar cuerpo con cuerpo.
Un Sargento da la orden de replegarse, tuvieron que correr bajando la montaña y cada 5 segundos debían hacer cuerpo a tierra por los impactos de morteros, pararse y seguir corriendo y otra vez cuerpo a tierra así sucesivamente ya que la onda expansiva los levantaba 5 cm del suelo y si los agarraba parados podían quebrarse todo el cuerpo. Les caía tierra, piedras, perdigones, etc. Llegaron al Pueblo pasaron una noche, estaban en posición para enfrentarse y esperar el ataque cuando unos superiores los encerraron en un galpón, a alrededor de 100 soldados y les anunciaron la rendición. Expresa que sintió mucha bronca.
Fueron custodiados hasta el Aeropuerto donde ellos iban tirando sus armas, ahí estuvieron 3 días prisioneros. Alrededor de 6 se escaparon, y fueron hasta unos contenedores, donde uno de ellos hablaba inglés y pidió permiso para abrir alguno y sacar comida. De esta manera descubrieron mucha ropa, guantes, abrigos de lana, camperas, chocolates, sacaron carne para hacer un asado, sus compañeros pudieron hacer torta fritas, pastelitos, consiguieron cigarrillos, etc.
Ya embarcados en el buque Hospital Rompehielos A. R. A. Alte. Irizar, fueron camino al continente para luego continuar su camino hacia el Palomar, los tuvieron en Campo de Mayo una semana por lo que él cree, los querían engordar, por la cantidad de comida que les daban. Los hicieron escribir lo que habían vivido, con firma y número de documento, ya pasados los días comenzaban a llegar familiares de todos, a los alambrados, por la desesperación de ellos de ver a su familia les dieron salida. Él no había tenido comunicación todo ese tiempo.
Recibimiento:
Claudio tuvo unos días posteriores muy duros, sus papas no querían que contara que había estado en el conflicto de Malvinas. no lo dejaban salir, el reclama la falta de ayuda psicóloga en ese momento por parte del Estado Nacional quienes son los que debían haberlo ayudado, llego a vivir momentos muy duros como cuando pasaban aviones hacia inconscientemente cuerpo a tierra, en las fiestas debía encerrarse por no aguantar el ruido de los fuegos artificiales. Estuvo mucho tiempo así hasta poder hacer tratamiento.
Posguerra:
Fue muy difícil conseguir trabajo, trataba de no decir que era Veterano de Guerra ya que le paso en varias fábricas que si era de la clase `62 no lo tomaban.
Nuestro Héroe volvió a Malvinas en 2018, quería volver para cerrar su historia. Estuvo 2 horas en esa montaña donde combatió, llorando y recordando todo lo vivido. Busco cartas que habían enterrado en ese sector, pero no pudo encontrarlas. Nos cuenta que le sirvió de mucho el haber vuelto y se sintió satisfecho por haber defendido a la Patria, aunque no fue fácil. Visito el cementerio, a los compañeros que perdió, al Teniente 1º Márquez y al soldado Curima.
Hoy en día Claudio Mediavilla se desempeña como auxiliar en educación, en la Escuela Nº6 E.S.B En Belén de escobar.
Sigue luchando por los golpes que le da la vida, pero él es muy fuerte y es un Héroe, cuida a su familia y disfruta de sus nietos.
Para finalizar Claudio nos deja un deseo:
“El Centro de Veteranos de Guerra del Partido de Escobar debe ser heredado por los hijos de veteranos de Guerra, para seguir cuidando nuestro museo y seguir Malvinizando”
Nota realizada por: Vanesa CARDOZO
